La reintroducción del águila pescadora, una guardería forestal propia y una brigada propia contra incendios. Son algunos de los proyectos por los que apuesta el presidente de la Junta Rectora del Parque Natural del Montgó, Joan Sala, quien ha visitado nuestra redacción informativa de Dénia FM.
Con Sala hemos repasado algunos temas que afectan a este Parque Natural, como ese proyecto de reintroducción del águila pescadora que se encuentra en «stand by», en lo referente a este paraje. Y es que en el Parque Natural de la Marjal Pego-Oliva sí que se está llevando a cabo. Al respecto, Sala asegura que donde había referencia de la existencia de una pareja de esta especie fue en los años 70 en el Montgó. Sin embargo, el proyecto está incompleto, ya que este año se han reintroducido una docena de ejemplares de águila pescadora en la Marjal Pego-Oliva, cuando el programa fijaba una decena en el Montgó y otras tantas especies en la Marjal. Pero en el primero, lamenta «no se ha hecho nada», subrayando que sería la primera experiencia de reintroducción cerca de Penya-segats marinos. Reclama mayor «ilusión» por parte de la Conselleria para hacerlo posible, y asegura que «necesitamos un impulso» porque las asociaciones están conformes. Es más ha dado a conocer que la Cofradía de Pescadores de Dénia es la que facilita el alimento para el águila pescadora de la Marjal.
Entre los problemas, los postes y líneas de media tensión. Pero en este sentido, Sala ha señalado la implicación de entidades y empresas, como Iberdrola que ha soterrado la línea desde la carretera de Les Planes hasta el Cap de Sant Antoni, y también en la zona de Les Rotes se tiene que proceder de esta forma. Esta acción es «importante», señala, para la reintroducción del águila pescadora.
Otro aspecto sobre el que se ha pronunciado, el de la superpoblación de jabalíes, reconociendo que «se nos ha ido de madre», al igual que el tema de las gaviotas en el Castillo. Recuerda que esta situación se ha producido, entre otros factores, por el abandono de los campos y porque no hay un depredador. Al respecto, explica que la última referencia de lobos fue en el siglo XIX en Segària. Incide en la necesidad de controlar esta situación porque la proliferación se ha convertido en un problema.
También le hemos preguntado por la urbanización fantasma de El Greco, el control de accesos y vigilancia a la Cova Tallada, la vegetación en los barrancos del Montgó o los cortafuegos.
Sala ha reconocido que la trayectoria del Parque Natural «ha sido difícil, al principio costó mucho, sobre todo por parte de los promotores», pero ahora «curiosamente», añade, «he escuchado a más de un promotor que se alegan de que esté el parque natural», apuntando que «cuando haces una promoción de las casas pones fotos del paisaje».
Y entre los proyectos que le gustaría ver realizados, además del de reintroducción del águila pescadora, que el Parque Natural tuviera una guardería forestal propia y una brigada contra incendios propia.
