Cultura

La Caridad de Domingo Llorens se exhibe en el Museo Etnológico de Dénia después de una cuidadosa restauración

El artista en su taller / Ayuntamiento Dénia

«La Caridad» de Domingo Llorens Cervera se exhibe al público en la planta baja del Museo Etnológico de Dénia (C. Caballers, 1) después de un minucioso proceso de restauración que ha devuelto a la obra del pintor el esplendor original. La Caridad se podrá visitar todos los días de la semana de 10 a 13 horas.
Además, el área de Arqueología y Museos ha programado para las próximas semanas dos visitas guiadas que permitirán un acercamiento a la obra, al artista y a su tiempo, así como al proceso de restauración que permite su óptima visualización y conservación. Las visitas se realizarán el miércoles 27 de diciembre y el miércoles 3 de enero, a las 12 horas. La inscripción previa necesaria para participar puede hacerse, de lunes a domingo, en horario de 10 a 13 horas, al teléfono 96 642 02 60.

La Caridad llegó al Museo Etnológico a marzo del año 2018. Después de un proceso de localización y presa de contacto, se procedió a la licitación en subasta y adquisición del óleo “Caridad” del pintor, una obra capital en la trayectoria del pintor. La obra de arte fue donación de la Fundación Deportiva Dénia al Ayuntamiento de Dénia, condicionada a la exposición pública permanente.

El artista durante el proceso de restauración

El origen
El cuadro es un óleo sobre lienzo con la firma en el ángulo inferior izquierdo del cuadro. Presenta aquel tema tanto del gusto de la burguesía ochocentista; los pobres y la caridad desarrollada hacia esa clase de personas, según señala la jefa del área de Arqueología y Museos, Massu Sintió.
En una carta datada el 1856 a Bernardo López, hijo del maestro que había sido Vicente López, Domingo Llorens Cervera refiere que está trabajando en un cuadro de pobres, sin duda La Caridad.

El cuadro presenta una escena situada a la puerta de una iglesia donde en medio se sitúa el personaje principal, una muchachita, que es quien ejerce la caridad bajo la mirada complacida de la persona que lo acompaña, una mujer con indumentaria oscura. Sobre esta imagen, vestida de blanco, se dirige y concentra toda la luz del cuadro. Se trata de un personaje ricamente ataviado, con ropas, joyas y peinado que destacan por el carácter exhaustivo del detallismo del autor. El personaje principal extiende la mano para ofrecer una moneda, repartir limosna, a un muchachito arrodillado, descalzo y mal vestido, bajo la mirada atenta otros tres de parecida condición.


Técnicamente el cuadro presenta una composición en la cual todo el peso e intensidad de la escena recae en la parte inferior, desde donde se desarrollan composiciones secundarias a partir del personaje central. La paleta es de colores cálidos aplicados con pincelada corta y segura, haciendo uso de veladuras y empastes puntualmente. La luz, que se fija en el personaje central desde la derecha, lo hace de manera muy intensa.
El cuadro es de formato rectangular de disposición vertical y unas dimensiones de 170 x 142 cm. “Sabemos, ahora que ha sido realizada la restauración, que el lienzo está formado por tres fragmentos de tela de lino cosidos entre sí, clavado sobre un bastidor de las mismas dimensiones, de madera de conífera”. Se trata del bastidor original de la obra, firmado por el autor. Presenta un marco dorado, comercial, no artesanal, “que por las características, no corresponde a la época de la obra”.

La restauración
La Caridad de Domingo Llorens Cervera presentaba un estado de conservación muy malo con unas patologías principales producto de antiguas intervenciones, repintes y rebarnizados; película pictórica con cordilleras provocadas por la contracción de las capas de barniz; suciedad general y manchas; apoyo textil degradado y con un pH muy ácido y, finalmente, ataques biológicos.
Los trabajos se han efectuado con una metodología científica y siguiendo un criterio museístico de mínima intervención, segundos el cual han sido efectuados únicamente los procesos necesarios para solucionar las patologías que afectan la obra y garantizar su conservación a lo largo del tiempo.
“A pesar de que las técnicas de restauración aplicadas en una anterior intervención no son adecuadas, las reintegraciones son de mucha calidad artística, con una ejecución excelente. Es por eso que se ha seguido el criterio de eliminar solos las reintegraciones mal aplicadas que alteraban la lectura de la obra o pudieran producir daños mecánicos sobre la superficie pictórica. La revisión periódica de la obra garantizará la prevención de patologías y permitirá una buena conservación”, explica la jefa del área de Arqueología y Museos.
El equipo responsable de la restauración han sido Lorena Morillas Bono y José L. Pascual Hidalgo del Taller de Arte y Restauración de Bocairent, con un anchísimo y reputado historial de intervenciones sobre obras de arte tanto amueblo como inmueble, con proyectos complejos como por ejemplo rehabilitación de iglesias o palacios. Los trabajos han sido promocionados por el Museo Etnológico con contribución de la Dirección General de Patrimonio.

El pintor Llorens
De Domingo Llorens Cervera, el pintor Llorens, sabemos todavía muy poco. Se trata de un personaje que, desgraciadamente, permanece pendiente de estudio y de documentación y catalogación de su obra, muy dispersa, circunstancia que dificulta la consecución del objetivo. El pintor nace en Dénia el 10 de febrero de 1827, a pesar de que esta fecha depende de la fuente consultada. Domingo Llorens tendría la suerte de formarse en València desde donde accedería al círculo del pintor Vicente López. En la muerte del maestro, Domingo Llorens volvería a la ciudad en que nació donde se convertiría en el cuidadoso pintor de la burguesía ochocentista. Domingo Llorens murió en Dénia el 8 de mayo de 1905.

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