La Selección Valenciana Sub 19 de Fútbol Sala, logró su pase a la Fase Final del Campeonato de España de Selecciones Autonómicas tras ganar en el pabellón de Puebla de la Calzada a la Selección de Aragón por 5 a 2.
Los valencianos sabían que para alcanzar estar entre las ocho mejores selecciones de España solo les valía ganar. A Aragón con sumar un empate les servía. Tras el triunfo los valencianos saben que tendrán como rival a la Selección de Murcia, en una fase que se jugará a finales de enero.
El calpino, Carlos Alonso y Mateu pusieron a prueba al meta maño, David Marín; Carlos Pérez salvó con eficacia la primera llegada aragonesa. Dos acciones consecutivas en el minuto 12 de partido rompieron el choque y abrieron ventaja para los valencianos.
El jugador del Ye Faky FS, Raúl fue el origen de las dos. En la primera, la diagonal de Adri Rubio fue primorosa, para dejar solo a Arechaga que empujó a la red.
En la segunda, el propio Arechaga recibió de Raúl entre líneas, asistió a Mateu en el segundo palo y el rechace lo empujó con rabia a la porteria el propio Koke.
Aragón se hacía pequeña y el combinado valenciano gigante. Tres minutos después, otra trepidante contra supuso el tercer gol, obra de Paco Sanz, tras el intento previo de remate de Carlos Alonso. Aragón despertó y se hizo grande la figura de Carlos Pérez con dos paradas a bocajarro. A 26 segundos del final Pedro Altaba superó por bajo al meta valenciano para hacer el 3-1. Resultado con el que se llegó al descanso.
La reanudación no pudo ser peor. Un disparo frontal de Kike Liao se le escapaba a Carlos Pérez y suponía el 3-2. Dos goles psicológicos que echaban al traste el gran inicio de encuentro.
A 8:50 para el final llegó el 4-2 en un latigazo de Mateu desde el ala izquierda. Se podía hacer la hombrada de ganar por 3 goles y lograr la clasificación. Los últimos minutos fueron dramáticos. La tensión se palpaba. Los chicos de Patxi Aguilar estaban convencidos de que la ocasión iba a llegar. Y más de una llegó. El portero salvó dos opciones clarísimas. El desánimo cundía.
Y cuando nadie confiaba, llegó la genialidad de Coke Arechaga, sin ángulo, para marcar de puntera con la zurda el gol de su vida. El quinto para la formación valenciana, que suponía el billete para la siguiente fase.
Tan importante fue este gol como la parada de Carlos Pérez, el meta de Pinoso, a un segundo del final sobre la misma línea.