El pasado viernes 8 de marzo, el salón de plenos del ayuntamiento de Calp fue testigo de una reunión de los representantes de la comunidad educativa del municipio, junto con autoridades locales y regionales. Entre los presentes estaban los directores de los centros educativos, representantes de las AMPAS, la alcaldesa, Ana Sala, la concejala de Educación, Mariola Mulet, el concejal de Territorio, Juan Manuel del Pino, y la inspectora de Educación de la Conselleria, Soledad Sempere.
Durante la reunión, se abordaron dos problemas en el ámbito educativo del municipio. En primer lugar, se discutió la situación de bloqueo del Pla Edificant, que ha generado retrasos en proyectos cruciales como la construcción del segundo Instituto de Educación Secundaria (IES) y el Centro de Educación Especial (CEE) Gargasindi. Además, se trató la escasez de infraestructuras educativas para el próximo curso.
Ante esta situación, se acordó, a solicitud de los representantes de los centros educativos y las AMPAS, ceder cerca de 30.000 metros cuadrados de terreno municipal ubicado detrás de la Escuela Infantil Silene de Ifac. Este terreno será utilizado por la Conselleria para instalar aulas prefabricadas que albergarán a los alumnos de los centros desbordados y un nuevo IES completo. La inversión municipal para la adecuación del terreno será de 3.200.000 euros.
La alcaldesa expresó sus reticencias ante esta medida provisional, señalando la preocupación de que la situación de las aulas prefabricadas se prolongue durante años, retrasando así la licitación de las obras del Pla Edificant. Sin embargo, la representante de la Conselleria argumentó que las aulas prefabricadas son una solución necesaria frente al creciente número de matriculaciones en el municipio, respaldada por la última reunión del Consejo Escolar Municipal.
La alcaldesa, Ana Sala, destacó la importancia de trabajar en conjunto con la Conselleria para garantizar una educación de calidad en Calp. «No renunciamos ni al segundo IES ni al Colegio Gargasindi, reivindicados históricamente», declaró. «La educación es esencial y los centros deben estar en condiciones que merecen los alumnos y la comunidad educativa. No podemos funcionar con barracones, aunque sea una solución provisional. Seguimos pidiendo que se liciten los centros educativos, y el Ayuntamiento está dispuesto a colaborar, pero es crucial una mayor implicación de la Conselleria».