Durante la reciente Universitat Catalana d’Estiu, celebrada el 18 de agosto, varios alcaldes de diferentes regiones se han unido para exigir un cambio en el sistema de financiación para los municipios. La principal demanda: más autonomía fiscal y de deuda, junto con una revisión profunda del modelo de financiación actual.
El alcalde de Pedreguer, Sergi Ferrús, destacó la situación financiera complicada de los municipios, a pesar de que muchos, como el suyo, cuentan con remanentes económicos significativos.
«No es posible que nos obliguen a mantenerlos en el banco, mientras seguimos reduciendo deuda, si ya estamos a 0 € en deudas desde hace años», explicó Ferrús. En este sentido, abogó por un sistema que permita mayor flexibilidad para gestionar estos recursos y destinarlos a proyectos que beneficien directamente a las comunidades.
Obsolescencia de las diputaciones
Ferrús también se refirió a la obsolescencia de las diputaciones, acusando a la de Alicante de recortar ayudas esenciales. «No solo no ejecutan la mayor parte del presupuesto, sino que, además, recortan subvenciones vitales como la prevención de incendios», afirmó. El alcalde de Pedreguer también destacó la importancia de recuperar los Consells Comarcals para una mejor gestión de los recursos a nivel local.
Por su parte, el alcalde de Elna, Nicolau Garcia, mostró su frustración con el centralismo del Estado francés, que considera ha empeorado en los últimos años. Este mensaje fue secundado por otros representantes municipales, como Jaume Oliveras, vicepresidente de la Asamblea Catalana de Municipis y alcalde de El Masnou, quien enfatizó la necesidad de un cambio en las leyes de financiación y en la gestión de recursos.
Desafíos comunes
En una sesión de una hora y media, los responsables municipales pusieron en común varios problemas que afectan a todos los territorios representados: financiación, vivienda, movilidad, políticas sociales, lengua y cultura. A lo largo de este foro, los alcaldes dejaron clara su intención de crear una agenda común municipalista que resista los retos del contexto político actual.
El evento también sirvió para defender el catalán como lengua común y reivindicar la unidad entre los diferentes territorios que comparten esta lengua. Ferrús agradeció la invitación de la Associació Catalana de Municipis y la Universitat Catalana d’Estiu, señalando que este tipo de encuentros son fundamentales para mantener viva la cultura y la identidad compartida. «Es una cita consolidada del mundo universitario en catalán», añadió.
Finalmente, el alcalde de Pedreguer respondió a las críticas recibidas desde el PP y otras instituciones que cuestionaron su presencia en el evento. Ferrús consideró que esas críticas eran esperables y señaló que, mientras sea alcalde, continuará participando en todos los foros donde pueda defender los intereses de su municipio. «Es delirante que ahora exijan lo que no hicieron cuando tuvieron poder. Esto se llama cinismo y fariseísmo», concluyó.
El evento, que reunió a más de 1.500 participantes, abordó una variedad de temas a través de cursos académicos, talleres, espectáculos y foros, siendo un espacio clave para el intercambio de ideas y la reflexión en torno a los desafíos contemporáneos que enfrentan los territorios de habla catalana.
