Medio ambiente

Nuevo manual para la retirada de restos de posidonia en playas

La Conselleria adapta las normas a las necesidades locales para preservar la seguridad y salud de las playas
Posidonia en las playas de la Marineta Cassiana / Tino Calvo

La Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio ha actualizado el manual de buenas prácticas para la retirada de restos de posidonia oceánica y seba en las playas de la Comunitat Valenciana. Este manual, destinado a los municipios costeros, tiene como objetivo equilibrar la conservación del medio ambiente con las necesidades de los habitantes y turistas.

Según la nueva resolución, se establece una medida excepcional para permitir la retirada de estos restos, exclusivamente en playas naturales, entre el 15 de junio y el 15 de septiembre. Este procedimiento solo se autorizará si la acumulación supera los 10 centímetros de altura y 1,5 metros de anchura. Además, no será necesario realizar la retirada de forma manual, lo que agiliza el proceso en ciertos casos.

Modificación de criterios para espacios protegidos

En esta actualización también se revisan los apartados a) y d) del punto 4, lo que introduce nuevos criterios de autorización para la retirada de los restos. De acuerdo con la resolución, no se permitirá la retirada de arribazones en espacios protegidos ni en las zonas que forman parte de la Red Natura 2000, un área clave para la preservación de la biodiversidad en la región.

El manual de buenas prácticas, aprobado en abril de 2024, fue redactado en cumplimiento del Decreto 64/2022 y tiene como propósito principal proporcionar a los municipios costeros directrices claras sobre cómo gestionar los restos de estas plantas marinas de forma que se proteja el ecosistema sin perjudicar el disfrute de las playas por parte de los usuarios.

El valor ambiental de la posidonia y la seba

Aunque estos restos pueden parecer un obstáculo para el uso de las playas, la posidonia y la seba cumplen una función crucial en la protección de las costas. Estos residuos ayudan a conservar la biodiversidad y protegen las playas de la erosión, pero, a su vez, pueden interferir con las actividades recreativas en las zonas de baño.

La Conselleria subraya que esta nueva resolución continuará siendo parte de sus esfuerzos por fomentar la sostenibilidad y la protección de la costa. A medida que surjan necesidades específicas en distintos municipios, se realizarán las adaptaciones necesarias para asegurar que tanto el medio ambiente como la salud pública estén debidamente cuidados.

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