El psicólogo especialista en psicología clínica, autor, investigador y comunicador, Roberto Aguado es el encargado de dirigir una jornada sobre educación emocional, en el marco del espacio de Ciencias Sociales, dentro del ciclo ‘Dénia, Ciutat del Pensament’.
Las jornadas, a desarrollar los días 21 y 22 de octubre, en el colegio Llebeig de Dénia, están dirigidas al alumnado y profesorado de ESO de los centros educativos de la ciudad. Durante las ponencias, Aguado aborda la relevancia de la gestión emocional en la convivencia, el bienestar y el aprendizaje, destacando su influencia en la prevención del acoso escolar, la autolesión y la autolisis.
En la previa, el también presidente del Instituto Europeo de Psicoterapias de Tiempo Limitado ha atendido a la entrevista de Patricia Blázquez, para Dénia FM.
Con más de 30 años de experiencia en el campo de la psicoterapia, Aguado ha destacado la importancia de trabajar desde la prevención emocional en los primeros años de vida, ya que, según él, la mayoría de los problemas emocionales de los adultos tienen sus raíces en la infancia.
Durante la entrevsita, Aguado ha enfatizado en que «en la escuela primero se sanan vidas, luego se enseñan asignaturas», refiriéndose a la necesidad de cuidar el bienestar emocional de los estudiantes antes de esperar que se concentren en el aprendizaje académico. «Lo que realmente importa es lo que sentimos en cada momento. Según estemos en rabia, tristeza, alegría o seguridad, así la vida tiene un color u otro», ha explicado.
En un momento delicado, el experto se ha referido al caso de Sandra Peña, la niña de 14 años que se suicidó tras sufrir acoso escolar en Sevilla, un hecho que ha abierto un amplio debate sobre cómo gestionar el bullying en las escuelas.
«El suicidio es una realidad alarmante», ha señalado Aguado, quien ha subrayado que «debemos hacer mucho en términos de prevención emocional«. Además, ha insistido en la importancia de no caer en falsas denuncias sobre acoso escolar, destacando que «el bullying está muy mal definido y es necesario que los docentes tengan la autoridad para evitar cualquier tipo de violencia en las aulas«.
Otro de los temas tratados por Aguado ha sido cómo los profesores deben aprender a detectar señales de malestar emocional en los estudiantes. Según ha explicado «la emoción no se piensa, se expresa en el cuerpo», y para intervenir adecuadamente, los docentes deben observar las señales no verbales de los estudiantes, como su lenguaje corporal, gestos faciales o incluso el color de la piel.
El psicólogo ha incidido en que, en la convivencia escolar, no todo conflicto es bullying, y es crucial poder diferenciar entre violencia directa y malestar individual.
Finalmente, ha reflexionado sobre la necesidad de integrar la inteligencia emocional en el currículo escolar. «Es como integrar el oxígeno en los colegios», ha afirmado, destacando que «sin educación emocional no hay vida». Según Aguado, la inteligencia emocional es esencial para el desarrollo personal, ya que «lo que sentimos es lo que realmente importa».
Escucha aquí la entrevista:
