El pasado miércoles 26 de noviembre, alrededor de las 18:30 horas, la joyería «Antolinos» en Xàbia fue asaltada por tres individuos. Según la propietaria del establecimiento, Manoli Antolinos, los asaltantes entraron en el negocio tras empujar la puerta, que no se encontraba completamente cerrada debido a un pequeño obstáculo. En ese momento, la comerciante estaba limpiando las vitrinas y tenía abierta la caja fuerte.
Los ladrones, con el rostro cubierto por pelucas y barbas postizas, actuaron rápidamente. Uno de ellos agredió a Manoli, quien fue derribada al suelo detrás del mostrador. El agresor la inmovilizó y la tapó la boca y los ojos mientras los otros dos delincuentes se dirigían a la caja fuerte y sustraían numerosas joyas. En cuestión de minutos, los ladrones llenaron dos grandes bolsas con productos de alto valor, entre ellos anillos, collares, pulseras y relojes de oro. La dueña de la joyería estimó que el valor del botín podría superar los 400.000 euros.
Tras el asalto, Manoli logró levantarse y salir al exterior a pedir ayuda. Los vecinos, junto con la Policía Local, la Guardia Civil y una ambulancia, llegaron rápidamente al lugar. La comerciante fue atendida y trasladada al hospital de Dénia.
En declaraciones al diario Levante-EMV, la joyera, que había planeado su jubilación tras décadas de trabajo, señaló que lo sustraído representaba una parte significativa de sus ahorros personales. Aunque la Guardia Civil ya ha revisado las grabaciones de las cámaras de seguridad, en las que se puede ver a los asaltantes huyendo con el botín, Manoli no espera recuperar las joyas.
El día anterior al asalto, la joyera había tenido un encuentro sospechoso con dos jóvenes que pidieron ver las joyas más caras de la tienda, lo que podría ser una pista clave para la investigación.
