La Concejalía de Cultura de Ondara, dirigida por Rosa Ana Marí, ha presentado el proyecto «Biblioterapia Libre», una propuesta innovadora que consiste en la instalación y mantenimiento de cuatro casitas de biblioteca en puntos estratégicos del municipio: El Prado, el Centro de Salud, el Parque del Caragol y el Parque de Marjals. El objetivo es acercar la lectura a la ciudadanía de una manera libre, sencilla y cotidiana, convirtiendo los espacios públicos en microescenarios culturales.
El sistema se basa en el intercambio voluntario: cualquier persona puede coger un libro y, si lo desea, dejar otro. Además, la Biblioteca Municipal proveerá periódicamente libros de diferentes géneros para garantizar la variedad.
Según ha explicado la concejala de Cultura, Rosa Ana Marí, «queremos que la lectura forme parte de la vida diaria, que esté presente en los parques, en los espacios de convivencia e incluso en los momentos de espera en el centro de salud. Es una manera de fomentar el bienestar emocional y la relajación a través de los libros».
El proyecto tiene múltiples finalidades: fomentar la lectura en espacios públicos, utilizarla como herramienta de bienestar (biblioterapia), acercar la cultura a la calle, dar nueva vida a libros reutilizados, potenciar la sostenibilidad y favorecer la convivencia comunitaria. Además, se pretende facilitar el acceso libre y gratuito a libros sin trámites ni inscripciones, impulsando el hábito lector entre niños y adultos.
Marí ha destacado que “con Biblioterapia Libre hacemos de Ondara un municipio que integra la lectura en su modelo de ciudad educadora, creando espacios culturales dentro de los parques y zonas públicas”.
El mantenimiento de las casitas y la revisión periódica se realizará desde la Concejalía de Cultura y la Biblioteca Municipal, con la colaboración ciudadana para garantizar el buen estado de los libros y las instalaciones. Con esta iniciativa, se espera una mayor presencia de lectura en espacios informales, un incremento de la participación comunitaria y una mejora del bienestar emocional de los usuarios, al mismo tiempo que se revalorizan los parques y espacios públicos como lugares culturales.
