Además de las reacciones políticas, por parte del equipo de gobierno de Dénia, PSPV-PSOE y Compromís, tras el anuncio de la Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio sacara a licitación la concesión demanial para la construcción y explotación de una instalación de ocio y hostelería en el Puerto de Dénia, en la zona de la playa del Raset, de los Tamarindos; no se han hecho esperar tampoco las reacciones sociales.
La plataforma Cultura Sostenible Dénia ha convocado una protesta ciudadana, el domingo 21 de septiembre a las 10 horas, en la playa del Raset, con el lema “Salvemos el bosque del Raset y nuestra costa”.
Los organizadores rechazan la privatización de la playa, la construcción de un centro comercial en zona de riesgo y la destrucción del ecosistema, apostando en su lugar por una Dénia sostenible, la protección ambiental y el impulso del comercio local.
Desde Cultura Sostenible Dénia defienden que «el bosque del Raset es vida, es protección, es futuro«, añadiendo en la convocatoria que «no permitamos que lo destruyan por intereses privados. ¡Tu voz cuenta! ¡Tu presencia importa!»
Escucha aquí la entrevista mantenida con una representante del colectivo:
La movilización se plantea como una protesta pacífica, familiar y respetuosa, e invitan a los asistentes a acudir con pancartas y camisetas verdes para defender el bosque del Raset como símbolo de vida, protección y futuro.
Una zona abandonada asilvestrada , normalmente sucia, donde no solo los perros dejan sus excrementos desgraciadamente ( por eso esta zona de la playa de siempre la llamábamos EL Cagarritar), con latas, meados entre plantas roñosas, en definitiva una zona más de Dénia abandonada por el ayuntamiento y encima casi siempre llena de algas secas …. ¿ ese estado de cosas hay que defenderlo?. ¿ No será mejor una zona ordenada y de calidad?. ¡ pues arréglenlo, límpienlo ayuntamiento del desastre!. Sea lo que sea seguro que es mejor que el bodrio de parque industrial en pleno Marqués de Campos que han hecho, eso lleno de hierros, que llaman refugio climático y no es más que un refugio para repartir obras y derrochar nuestros impuestos.