Sanitat
Calp pone de manifiesto las deficiencias en la atención sanitaria que sufre la comarca. En el pleno ordinario del mes de junio, celebrado esta semana en el ayuntamiento calpino, se aprobaron dos propuestas de resolución a instancias del equipo de gobierno, PP y C’s, en las que, por una parte, se reclamaba más facultativos especializados en salud mental, y por otra, requerían que se instale el circuito rápido oncológico de prevención del cáncer.
Fue la portavoz del Partido Popular, Noelia Ciscar, quien defendió ambas mociones, siendo especialmente crítica en lo que respecta a la falta de psiquiatras que cubran las necesidades reales de la comarca.
Císcar, quien además es psicóloga, indicó que, a día de hoy la Marina Alta sólo cuenta con dos psiquiatras para toda el área sanitaria, y un único médico en la especialidad para niños y jóvenes de nuestro departamento de salud. Tampoco hay psiquiatras de guardia. Ciscar denunció que la Unidad de Salud Mental de Calp, lleva ya 8 meses sin psiquiatra.
Una situación que está dejando importantes consecuencias en los pacientes, en sus familias y en los profesionales del área, como remarcó la edil.
La portavoz popular indicó que la situación era precaria antes y ahora es peor, “si antes estábamos a menos cuatro, ahora estaremos a menos dos, pero el servicio sigue siendo deficitario”. Ciscar remarcó que “estamos hablando de enfermedades mentales graves , de pacientes con esquizofrenia que llevan meses sin medicarse”.
Incumplimientos
Igual de crítico se mostró el portavoz de Compromís, Ximo Perles, quien no dudó en indicar que la empresa Marina Salud «no tenía vergüenza». Mercantil que calificó de “piratas, que se dedican a saquear las arcas públicas a cambio de prestar un servicio que en realidad no ofrecen”.
Compromís, de hecho, presentó una enmienda a la moción adjuntando un informe que acreditaba, según los valencianistas, varios incumplimientos contractuales de la empresa. Así, Perles indicaba que “Marina Salud nos debe una ampliación del centro de salud, y no la paga excusándose en un sobredimensionamiento de las infraestructuras”. El edil valencianista lamentó que ya han pasado años evitando rendir cuentas de la plantilla a conselleria, y fue la abogacía de la Generalitat la que emitió un informe considerando que la compraventa de acciones de DKV en Ribera Salut había sido ilegal». Además, lamentaba que “sin embargo, ni la empresa, ni la conselleria, ni ninguno de los grupos políticos de Les Corts está haciendo nada para evitar esta barbaridad».
El Partido Socialista apoyó ambas mociones, e insistió en que había sido el Partido Popular quien privatizó la sanidad en la Marina Alta, y que el gobierno del Botánic apostaba por que, una vez terminada la concesión, la sanidad en la comarca volviera a ser exclusivamente pública.
La enmienda de Compromís no prosperó, pero si las dos mociones presentadas por PP y C’s, con las que el ayuntamiento de Calp exige a la empresa concesionaria de los servicios sanitarios del Área de Salud de Dénia, Marina Salud, y a la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública, que den una solución inmediata a esta carencia de profesionales de psiquiatría y se dote la comarca de los facultativos necesarios especializados en salud mental para paliar con urgencia la grave situación desatada por esta deficiencia.
