El Dénia Festival de las Humanidades ha venido para quedarse. Seis meses después del arranque, llega a la edición de primavera con el objetivo reforzado de convertir a Dénia en un referente del pensamiento, la reflexión y las humanidades. Y no sólo durante los días del festival. Porque el DFH “es mucho más, es un trabajo de 365 días de actividades, lugar de encuentro de pensadores en un territorio de creatividad donde las ideas vengan, se muevan y se arraigan para ser un territorio mejor”, en palabras del alcalde, Vicent Grimalt.
Grimalt intervino ayer en el primer acto de esta edición de primavera del DFH: la presentación del número 57 de ‘La maleta de Portbou’, un monográfico dedicado a la primera edición del Dénia Festival de las Humanidades celebrada del 27 al 29 de octubre de 2022.
Y aprovechó su discurso para anunciar que la casa de Torrecremada se convertirá en sede de la Ciudad del Pensamiento y Creatividad que organizará la puesta en marcha de actividades, seminarios, encuentros y debates “que harán fluir las ideas en nuestra ciudad ”, en colaboración con todos los actores que ya participan en el proyecto ya los que agradeció la implicación: Fundación Dénia Ciudad Creativa, Generalitat Valenciana, Balearia, Fundación “la Caixa”, La maleta de Portbou (dirección académica del festival ), AEHTMA, CEDMA, las universidades públicas valencianas, la UNED, asociaciones culturales de la Marina Alta y asociaciones empresariales de la Comunitat Valenciana.
Y para dar una idea del dinamismo del festival, Grimalt avanzó la agenda de los próximos meses: un seminario del Espai Lluís Vives. Humanidades y Empresa en junio; dos cursos de verano de la UNED en junio y julio y otras actividades que se están trabajando con la Universidad de Alicante, la Universidad de Valencia y la Universidad Politécnica de Valencia.
Incluso, avanzó la temática del próximo Festival de las Humanidades de Dénia, programado del 26 al 28 de octubre de este año, que girará en torno al planteamiento de “Mirar atrás para saber dónde vamos”.
Dénia avanza, pues, en el camino de convertirse en un “referente mediterráneo del pensamiento” porque, afirma Grimalt, “si nuestra ciudad es culta, universal, creativa, reflexiva y moderna será buena para quienes vivimos en ella y para los que tienen la suerte de visitarnos”.
La maleta de Portbou: mutaciones
El director de La Maleta de Portbou y director académico del Dénia Festival de las Humanidades, Josep Ramoneda y Joan Romero, catedrático de Geografía Humana en la Universidad de Valencia y miembro del Instituto Interuniversitario de Desarrollo Local, se hicieron calle de la presentación del monográfico de La maleta de Portbou dedicado al Dénia Festival de las Humanidades 2022.
Ambos conversaron sobre el festival, cuyo objetivo no es otro que divulgar las ideas y los debates del momento, convocando figuras representativas del pensamiento, la ciencia, la economía y las artes y convertirse en una cita de reflexión dirigida a la ciudadanía , individual y corporativa, que permita entender las claves del mundo en el que vivimos.
Joan Romero destacó la interdisciplinariedad “como uno de los aciertos del festival”, partiendo de la convicción de que “lo peor que les puede pasar a las humanidades es la fragmentación, lo que hay que hacer es lo contrario”. Abandonar la inercia de explicar lo que sucede separadamente, en sus palabras.
Por eso, el Dénia Festival de las Humanidades propone “una mirada holística” para reflexionar sobre los procesos que estamos viviendo en la época de cambio actual. Una mirada a la que deben incorporarse las ciencias naturales, sociales, de la salud y de la comunicación, “porque de manera aislada no se puede explicar lo que pasa”.
Romero y Ramoneda hablaron de las mutaciones -hilo conductor de la primera edición del DFH y del número especial de La maleta de Portbou- que están sucediéndose en un cambio de época “para el que todavía no tenemos un relato consistente y coherente ”, indica el catedrático de Geografía Humana. Una modificación de tendencias y percepciones intensificada por una pandemia “inesperada” que, sin embargo, “no significó un antes y un después” y una guerra, “no tan inesperada, que sí podría ser que lo cambie todo”.
Para reflexionar sobre todas estas cuestiones y buscar respuestas a la incertidumbre nace y continúa el Dénia Festival de las Humanidades, “una invitación a pensar juntos, a conversar desde distintas disciplinas, sin miedo a equivocarnos. Una invitación a adentrarnos en ese país extraño que es el futuro”.
