La última jornada de fútbol sala en la Marina Alta estuvo marcada por una serie de resultados desfavorables para la mayoría de los equipos de la región. Sin embargo, hubo algunas excepciones notables y momentos significativos durante los partidos.
El Racing Ondarense fue la única formación que saboreó la victoria en esta jornada. En un emocionante encuentro en la pista del Altea FS, el equipo de Ondara se impuso con un ajustado marcador de 2-1. Este triunfo les coloca en una envidiable quinta posición en la tabla, acumulando 25 puntos y quedando a solo tres puntos de la cuarta plaza.
En la Tercera División, grupo 15, el Calpe Futsal no tuvo la misma suerte y sufrió una contundente derrota en su propio pabellón. El Ye Faky se llevó el partido con un marcador de 6-3, dejando a los calpinos en una preocupante antepenúltima posición en la clasificación, con solo 12 puntos.
La jornada fue particularmente dura para el CFS Dianense, que regresó goleado de su visita a Bussot. El equipo sufrió una abrumadora derrota por 11-1. Además, el partido se vio marcado por el incidente del portero Álvaro Marín, quien tuvo que ser hospitalizado tras recibir un fuerte balonazo en el rostro. Afortunadamente, fue dado de alta tras pasar la noche en observación. Por otro lado, el Xalò FS tuvo una jornada de descanso.
En la Liga Autonómica Juvenil, el CD Paidos Mar Dénia-F. Fernández Luna no pudo evitar la derrota frente al Aspe, cayendo por un marcador de 5-3. Este resultado deja al equipo entrenado por Luis Llinares en la décima posición de la clasificación, sumando un total de 16 puntos.
En resumen, fue una jornada mixta para los equipos de fútbol sala de la Marina Alta, con algunas actuaciones destacadas, pero también con resultados que dejaron mucho que desear para varios equipos. Los próximos encuentros serán cruciales para definir las posiciones finales en las respectivas categorías.
