
El CD Dénia ha descendido a la Primera FFCV, una categoría que no pisaba desde la temporada 1969-70. Tras una temporada llena de altibajos, el equipo dianense, que en sus mejores años llegó a militar en Segunda B, sufrió el golpe definitivo al perder en la última jornada, frente a la UD Carcaixent por 3 a 4, ante su afición, en un partido lleno de emoción, pero también de frustración.
Un inicio prometedor
En el último partido de la temporada, el CD Dénia salió con mucha intensidad, con la intención de dar una alegría a su afición. Desde el principio, los locales dominaron el juego, superando a su rival hasta que, en el minuto 30, la UD Carcaixent consiguió un penalti a su favor que Jorge Seral transformó, poniendo el 0-1 en el marcador. A pesar de la adversidad, los locales reaccionaroncon determinación.
En el minuto 41, Lledó empató el partido, devolviendo la esperanza a la afición local. Y como si fuera un sueño, Ángel puso por delante al CD Dénia, a pesar de jugar en inferioridad numérica tras la expulsión de Óscar, haciendo que los jugadores y la grada se vinieran arriba, con un 2-1 en el marcador al descanso.
Los cambios y la expulsión, claves en la derrota
A pesar de jugar en inferioridad numérica en el segundo tiempo, los dianenses mantuvieron el control del juego. Sin embargo, el técnico Juanjo Antolí tomó decisiones que, a la postre, fueron perjudiciales. Maverik y Ferrán, dos de los jugadores más destacados, fueron sustituidos, y poco después llegó el empate de Dídac para la UD Carcaixent en el minuto 68.
El golpe psicológico fue inmediato, y poco después Dídac volvió a marcar, poniendo el 2-3 en el marcador y dejando a los locales sin reacción. A pesar de la gran respuesta de Alejandro González, quien empató a 3, el CD Dénia podía permitirse ese resultado, aunque le obligaba a ganar en la última jornada en Benigánim.

El descenso se consumó en los últimos minutos
El árbitro mostró dos tarjetas amarillas a Tomás, lo que dejó al CD Dénia con 9 jugadores, una situación que agravó aún más las dificultades. El equipo, ya con pocos efectivos, no pudo evitar el gol de Rober en el minuto 83, que sentenció el 3-4 y selló el destino del equipo.
El campo Diego Mena, que había sido testigo de tantas alegrías, se convirtió en un velatorio, con el silencio tomando el control del ambiente. La tristeza invadió los rostros de los jugadores y la afición, conscientes de que el descenso era irreversible.
Una temporada para olvidar
El CD Dénia cierra una nefasta temporada en la que la directiva no supo gestionar ni la parte económica, ni la social, ni mucho menos la deportiva. El descenso a la Primera FFCV es un jarro de agua fría para un club que tiene una larga historia y que, en su día, fue un referente del fútbol en la Comunidad Valenciana. Ahora, el club deberá reconstruirse desde sus cimientos y trabajar para volver a la categoría que merece, mientras se espera que en la próxima temporada se dé un nuevo rumbo al proyecto deportivo.